Rasteled: nuevos procesos enológicos para minimizar el deterioro fotoquímico en el vino

Bodegas Ramón Bilbao lidera este interesante proyecto I+D+I en colaboración con Bodegas Martín Códax (Galicia), Prilux Iluminación (Castilla La Mancha) y VITEC (Centro Tecnológico del Vino (Cataluña)). El objetivo del proyecto RASTELED ha sido estudiar la aplicación de nuevas tecnologías LED para hacer frente al posible deterioro fotoquímico que puede afectar, especialmente, a los vinos blancos, rosados y espumosos cuando se exponen a la luz ultravioleta-visible convencional.

Este proyecto, que pretende desarrollar soluciones sostenibles e innovadoras en bodega y lineales de venta con el propósito de terminar con las transformaciones fotoquímicas que alteran el color, el gusto y el aroma de estos vinos, ha contado con un presupuesto superior a los 750.000 euros con el apoyo financiero del Ministerio de Ciencia e Innovación y la Agencia Estatal de Innovación, a través de fondos FEDER de la Unión Europea.

Tras cuatro años de ejecución, el proyecto RASTELED ha logrado resultados significativos que han permitido confirmar la relación directa que hay entre la degradación de la riboflavina y la formación de aromas relacionados con el gusto de luz de los vinos. Además, se ha manifestado que existe una graduación del riesgo de aparición de este defecto en función del tipo de vino. Esta iniciativa ha logrado desarrollar y evaluar nuevos procesos enológicos que minimizan la aparición del gusto de luz o deterioro fotoquímico, así como el desarrollo de nuevas fuentes lumínicas LED que no emiten a las longitudes de onda críticas, ofreciendo dos soluciones a implementar en los protocolos de vinificación para combatir la aparición del gusto de luz y sus efectos negativos en la calidad del producto final. Por un lado, fuentes lumínicas que no degradan la riboflavina, y por otro, diferentes estrategias de elaboración para minimizar el riesgo de elaboración.

De esta forma, con RASTELED se pretende comercializar vinos con propiedades organolépticas mejoradas y más estables, debido al menor riesgo de deterioro, gracias a haber desarrollado una herramienta de cálculo que va a permitir diseñar fuentes de luz con contenido espectral que no degrada la riboflavina, eliminando así la aparición del gusto de luz. Todo un éxito que los participantes del proyecto celebran por haber conseguido unos resultados tan prometedores y que pronto se verán y saborearán en el mercado.

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