Los acabados mate en superficies de objetos cotidianos han cobrado una gran popularidad en los últimos años. Antes, estas texturas se asociaban esencialmente con el lujo, la exclusividad… con lo ‘distinto’. Hoy, una mayoría de interioristas consideran que aportan un toque de calidez, serenidad y elegancia. Además, permiten experimentar, proponer nuevos contrastes, matices y tonalidades con las que enriquecer el universo de sensaciones aportadas por la decoración.
La razón es que el mayor índice de dispersión de la luz reflejada por los acabados en mate otorga a los objetos una delicada sensación de prestancia y pureza. Esto concuerda a la perfección con la seductora estética de líneas simples de la serie LS 990 de JUNG. Tanto en blanco alpino como en negro, el acabado mate introduce un renovado poder de fascinación en la elegancia atemporal de esta serie de mecanismos, convertida en referencia del mercado desde hace más de 50 años.
Ya sea en blanco alpino o negro, la ausencia total de reflejos ofrece opciones de diseño aún por descubrir para los arquitectos de interior. El acabado mate añade nuevas dimensiones a la rotundidad poliédrica de la LS CUBE o a la discreción enrasada de la serie LS ZERO. Esta última gama de mecanismos de JUNG aporta una gran ligereza, continuidad y fluidez entre los mecanismos y la pared donde se instalan. Por el contrario, los de la serie LS CUBE son para montar en superficie, generalmente en hormigón, mampostería o piedra. Sin embargo, el acabado mate suma en ambos casos el valor de lo excepcional, aquel que destaca sin pronunciarse, solo gracias a su personalidad y temperamento.
Finalmente, el diseño esencialista de la serie A 550 o el dinamismo vibrante de los mecanismos A FLOW acentúan sus líneas rectas y su clara geometría en las versiones acabadas en mate, tanto en blanco alpino como en negro. Su tacto sedoso, sin duda más agradable, y el aspecto visual de alta calidad incrementan la satisfacción del usuario. Esto, según la denominada ‘economía de la experiencia’, se traduce en una valorización superior tanto del producto en sí como de quienes lo promueven y prescriben. En el caso de las gamas de mecanismos eléctricos de JUNG, supone además una ventaja añadida también para quienes los instalan.